Llega una nueva Semana, ya pasado el Maratón de Málaga que para mí ha sido todo increíble, ahora toca seguir mirando hacia delante.
Continúa lo mas difícil, o lo menos vistoso, pero donde se centra toda la clave del éxito: Los entrenamientos. Pues no es nada fácil como he dicho en otras ocasiones el levantarte temprano un día con frío, o lluvia . O salir a la calle de noche, calzarte las zapatillas y salir a correr. Aquí ya no hay gente animando a los bordes de la carretera, ni un dorsal que llevar colgado. Esos avituallamientos que siempre hay alguien que te mima y te da agua cuando lo necesitas. No hay el premio de una meta final en la que todo el mundo aplaude y sobre ti dejas el luminosos con el marcador del tiempo que has conseguido, nada de nervios y emociones por la competición. Aquí ya solo es un trabajo tuyo contigo mismo. Y créeme que habrán días como el que he tenido hoy, que parece que no has hecho deporte en tu vida, que tu corazón se acelera mas de la cuenta y tus pulsaciones se ponen por las nubes haciendo algo que días atrás hiciste con facilidad. Cuando el cuerpo te duele y para recuperarte te vuelves a calzar y sigues corriendo y haciendo Kilómetros día tras día... En otras ocasiones si encontrarás mejores sensaciones, Por eso en las buenas y en las malas hay que continuar, seguir entrenando, seguir dándolo todo. Todo suma y nos acerca a alcanzar nuestros retos.
Por lo tanto, en definitiva, tiene muy buenos resultados; pues el deporte es un baremo muy justo, en el que rindes si has entrenado, y si no lo has hecho, pues no, Así de simple. Así que ENTRENA!
Entrenamiento de hoy, 10 Kilómetros más entrenamiento de fuerza. Mañana más.
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